¡LO MEJOR ESTÁ POR VENIR!

“¿Y qué beneficio obtienes si ganas el mundo entero pero pierdes tu propia alma?¿Hay algo que valga más que tu alma?” Marcos 8:36,37

Cuando se anuncia un nuevo modelo de un producto o un dispositivo movil, y éste incorpora mejores características, el valor del modelo anterior se desploma; especialmente, si se va a dejar de producir.

Generalmente, los usuarios de este producto intentan actualizarse al nuevo modelo, y la versión anterior pierde su valor.

Dios continuamente nos habla de renovarnos, de que las cosas viejas pasaron, nos habla de dejar atras nuestro viejo ropaje, de renovar nuestra mente, de odres nuevos, de nuevos comienzos, y de hecho Jesus comienza su ministerio hablando de arrepentirnos para así renunciar a nuestra antigua manera de pensar y poder atraer el reino de los cielos.

De hecho hoy en día se habla de un antes y un después de la pandemia por el impacto que ha tenido en las vidas de todo el mundo. Es por ello que nunca debemos de enfocarnos a vivir conforme al mundo porque nuestro puerto final es el cielo. Jesus nos dijo que nuestra mirada siempre tendría que estar puesta en el Reino de Dios, porque es lo unico genuino, y de verdadero valor.

Todo el  mundo actual; va a ser completamente destruido. Conforme nos anuncian las escrituras, habrá un nuevo cielo y una nueva tierra.

En Apocalipsis 21:1 dice: “Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más”. Y en el versículo 4 leemos: “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”.

Los versículos 18-19 nos dicen: “El material de su muro era de jaspe; pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio; y los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa…”. Los versículos 23 al 25 van aún más allá: “La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina y el Cordero es su lumbrera. Y las naciones que hubieren sido salvas andarán a la luz de ella; y los reyes de la tierra traerán su gloria y honor a ella. Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche”. ¡Qué descripción! *¡Es verdaderamente un lugar anhelado!*

Nuestra mirada no debe estar puesta en este mundo actual, que será destruido. Recuerda las palabras de Jesús en el versículo inicial: “Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?”

Este mundo, que ciertamente será destruido y reemplazado por otro, no es digno de que pierdas tu alma. Así pues, entrégale tu vida al Señor, deja que El te muestre como soberanear en esta vida, y ponte Su yugo que es fácil para que toda tus cargas sean ligeras.

Apasiónate por el Evangelio de Jesucristo y por su divulgación alrededor del mundo, ora por los enfermos y ve como estos son sanados, aunque haya enfermedades no podrán tocar tu morada, y milagros y señales te seguirán a donde tú vayas porque eres portador de Su gloria y entre tanto que esperamos su gloriosa venida.