LA FE SIEMPRE FUNCIONA



“Examínense para saber si su fe es genuina. Pruébense a sí mismos..” (2 Corintios 13:5)

Hay quienes piensan que Dios permite que suframos calamidades, y que Él es responsable de las desgracias que padecen las personas.

Dios no es responsable de las maldades ni de las desgracias que experimentan las personas. Eso no es propio de Él.

Dios es amor, y no hay tinieblas en Él. Lo que hayas podido padecer que no sea coherente con lo que declara el evangelio de Cristo, no es de Dios.

La vida es espiritual, y tú eres el responsable de tu vida y de tus vicisitudes. Se trata de tu fe, y de cómo la apliques. Jesús dijo: “…si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible”. **

Ésta es una declaración soberana, por lo que la cuestión es ¿qué estás haciendo con tu fe? ¿Cómo estás aplicando tu fe? La Biblia dice: “El justo por la fe vivirá…”

Tienes la responsabilidad personal de usar tu fe para hacerle frente a las crisis de la vida diaria. Procura siempre ser hacedor de la palabra, y no se limitarse  sólo a oírla, pues te estarás engañando a ti mismo. ***

Esa es la clave, hacer la Palabra. Aplicas tu fe “haciendo” la Palabra. Somos practicantes de la Palabra. Si las cosas no van como esperas, la culpa no es de Dios; pues Él es perfecto. Puesto que Él es perfecto, has de pensar que ese problema tendrá su origen en otra cosa.

Cuando las cosas no funcionan es porque No consultaste a Dios, ó No hiciste exactamente lo que Él te dijo; o no lo hiciste en el tiempo oportuno.

Así pues, lo mejor es que examines tu propia fe, tal como dice el versículo de inicio.
El Señor no se escuda en la cuestión de la fe para no hacer lo que debe hacer.

La fe siempre funciona. Si dices que actuaste por fe, y no funcionó; entonces es que no era fe. Sigue creciendo en tu fe, a través de tu crecimiento en el conocimiento de la Palabra

** Marcos 17:20
*** Santiago 1:22