NADA ME FALTA



“Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y en él, que es la cabeza de toda autoridad y poder, ustedes reciben esa plenitud.” (Colosenses 2:9-10).

Podrás poner tu mirada en Jesús y pensar que Él solo es un hombre, como decían en tiempos de la Biblia; pero Jesús es Dios mismo.

La  palabra “plenitud” implica que no falta nada.
Y lo más asombroso de todo es que la Biblia dice que tú estás completo en Él, que es la cabeza de toda autoridad y poder.

Cuando Dios te mira, Él ve plenitud en ti, asi es que nunca procures ser imitador de alguien mas.

Eres competente con la competencia de Cristo. Desarrolla esta mentalidad, afirma estas cosas, y vive a la luz de ellas.

Tú confesión una y otra vez debe ser: “Padre, nada me falta; ¡pues en ti lo tengo todo! Yo estoy completo en Cristo; y soy competente con tu competencia.

Yo Soy pleno, en aquel me llamó”. Haz esto una y otra vez, y observarás como simplemente tendrás una paz incomprensible y todo obrará para tu bien!