SIEMPRE AVIVADO POR EL ESPÍRITU SANTO



“No se embriaguen con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sean llenos del Espíritu”
(Efesios 5:18).

Un hijo de Dios es adicto a la presencia de Dios. Busca estar siempre avivado por el Espíritu Santo; permaneciendo continuamente bajo su poder e influencia, las veinticuatro horas del día.

Ese es el anhelo del Espíritu para cada uno de nosotros; y para lograrlo es leer continuamente la Biblia, entonar cantos a Dios, y orar en el Espíritu.

Pueden ser también oraciones de acción de gracias, y de alabanza. En ocasiones son canciones proféticas; e incluso en otros momentos pueden ser canciones en lenguas del espíritu.

Desarrolla el hábito de estar siempre – todos los días- lleno del Espíritu. De esa manera, tu espíritu se verá fortalecido para la victoria y el éxito.

Mantente siempre avivado. No necesitas esperar a estar en la iglesia para ser lleno del Espíritu.

Puedes avivarte por el Espíritu EN CUALQUIER MOMENTO Y EN CUALQUIER LUGAR. De ti depende.

Progresa de lo conocido hasta lo desconocido. En otras palabras, comienza con lo que ya está escrito en los Salmos, como el Salmo 23 ó el 27, declarándolos en voz alta.

Tras pronunciar esas palabras, te sentirás profundamente avivado e inspirado para pronunciar tus propios salmos, que el Espíritu Santo te dará. Haz de esto una práctica continua en tu vida.