LLENOS DE DIOS



“Mi antiguo yo ha sido crucificado con Cristo. Ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Así que vivo en este cuerpo terrenal confiando en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó a sí mismo por mí.” Gálatas 2:20

John G. Lake uno de los líderes del movimiento Pentecostal más importantes,  visitó las reuniones callejeras de Azusa en la ciudad de Los Angeles, California donde se estaba llevando a cabo unos de los avivamientos más grandes de la historia a principios de los años 1900.  

En su libro, Aventuras con Dios, más tarde escribiría sobre el Pastor Seymour que fue uno de los iniciadores de Azusa :
 “tenía el vocabulario más divertido.  Pero quiero decirte que había médicos, abogados y profesores que escuchaban las cosas maravillosas que salían de sus labios.  
*No fue lo que dijo con palabras, fue lo que dijo de su espíritu a mi corazón lo que me mostró que tenía más de Dios en su vida que cualquier otro hombre que haya conocido hasta ese momento.  Fue Dios en él quien atrajo a la gente.”*

Cuando nos vaciamos de nosotros y nos llenamos de Dios es decir de Su Espíritu Santo, nos convertimos en imanes transformadores para las personas que se encuentran a nuestro entorno.

Si buscamos realmente el reino de Dios como dijo Jesús, lo demás viene por añadidura. Nuestro enfoque debe ser estar llenos de Dios porque solo así viviremos una vida que va de victoria en victoria y de gloria en gloria.

¿Estas Dispuesto?

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