IMANES DE BUENAS NUEVAS

*“Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al Padre que está en el cielo.” *(Mateo‬ ‭5:16‬ )

Uno de los grandes misterios de la vida es cómo las personas con determinados valores, ya sean buenos o malos, atraen a otras personas con los mismos valores.

De allí que los quejumbrosos son atraídos a la vida de los resentidos. Cuando esto sucede, es más que una ley natural en la que lo semejante atrae lo semejante, a través del interés mutuo.

Es así que la amargura y el resentimiento son tan infames que contaminan a grupos enteros de personas en un período muy corto de tiempo.

El corazón es algo hermoso, cuando está protegido. Pero puede ser infame cuando se le permite al enemigo sembrar semillas de discordia en él.

_¿Como proteges tu corazón?_
Cuando lo alimentas constantemente con estándares basados en la palabra de Dios, cuando escuchas música que lo enaltezca, o escuchas testimonios de lo que El Señor ha hecho en otras vidas, entonces te conviertes en un iman de buenas nuevas para otros.

Los valores internos del corazón ayudan a construir alianzas con el mundo invisible. Por ello debes renunciar a no asociar tu mente con noticias tóxicas, perdonas tóxicas y ambientes tóxicos.

El apóstol Pablo decidió asociarse con estos valores diariamente: *“Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza”. *

Si esta es la actitud de tu corazón atraeras cada vez más a las personas con gran esperanza y fe, que tienen historias que edifican la fe, o aquellos que tienen gran hambre de ser transformados.

Eres un *Imán de buenas nuevas,* no aceptes otra cosa.