CAMINA SIEMPRE EN AMOR

“Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen” (Mateo 5:44).

En la vida siempre habrá quienes puedan  criticarte, detestarte y obrar en tu contra; pero nuestro reto siempre será responder con amor.

Las acciones o actitudes de tales personas nunca deberían provocar que tú actúes en contra de tu verdadera naturaleza, que es el amor.

Dios es amor, y cualquiera que ama es de Dios, y conoce a Dios.

Lo más característico del carácter de Dios es el amor; por lo tanto, debemos imitarlo caminando en amor.

1 Juan 4:7-8 dice: “Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.”

A menudo seremos probados en nuestro carácter por lo que debemos comprender que todas las personas que te encuentres están ahí puestas para tu beneficio. Tanto si te están ayudando como si están en tu contra, ¡nada cambia!

Nada de eso detiene el plan de Dios de promocionarte. Si son amables, amorosos y serviciales hacia ti, aprécialos y dale gracias a Dios por ellos. Si no son así, ámalos de todos modos.Sigue caminando en amor.

El amor es una fuerza: es el poder más grande en el universo; y siempre vence. Nuestro caminar de amor es la prueba principal de que amamos al Señor; y da testimonio de nuestra comunión con Él.

El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo. Eso significa que tienes la capacidad de amar como Él.

Jesús dijo: “En esto conocerán todos que son mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros” (Juan 13:35). ¡Qué manera de distinguirnos del resto del mundo!