NUESTRO MEJOR GUÍA

“Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino” (Salmos 119:105).

La Palabra de Dios es luz. Ella es la luz verdadera que alumbra a todo hombre en este mundo. La Palabra de Dios nos da dirección en la vida y nos muestra el camino.

Entre tanto que no enciendes la luz, no sabrás bien en qué dirección ir, ni qué hay delante de ti. Si en alguna ocasión has intentado caminar en la oscuridad, estarás de acuerdo conmigo en que te tropezaste con muchas cosas que no podías ver a causa de la oscuridad. Si te desplazas en medio de la oscuridad, ni siquiera podrás distinguir cuando llegas a tu destino o si estás en un cruce.

Hay personas que han puesto su vida en riesgo al no seguir la dirección de la Palabra de Dios. Han tomado un camino muy diferente al camino de Dios. Hay quienes han emprendido un viaje a ninguna parte; porque ignoran la Palabra de Dios que les podría alumbrar y llevar a su destino.

La sabiduría y la dirección proceden de la Palabra de Dios. Cuando andas a la luz de Dios, nunca tienes tinieblas. Él nos guía en su luz. Esto es posible porque has nacido por la Palabra de Dios (1 Pedro 1:23), que es la luz verdadera.

Dios te ha dado su Palabra para alumbrar tu camino, a fin de que no haya tinieblas ni incertidumbres en tu vida. Así pues, siendo guiado por su luz, progresarás en la dirección del amor, el gozo, la justicia, la salud, la paz y la prosperidad.

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